Empezaremos diciendo que el jamón es la pieza de la pata trasera y la paletilla de la extremidad delantera, debido a la fisonomía del cerdo vemos que las delanteras son mucho más pequeñas que las traseras, ésta es su principal diferencia pero ahora comentaremos otras más.
El peso del jamón, generalizando un poco, está entre poco más de 6 hasta unos 8 kg. mientras que el peso de una paletilla esta aproximadamente entre 4 y 5,5 kg.
La paletilla cuenta con más grasa que el jamón y tarda menos en curarse, esto hace que esta misma tenga unos contrastes menos acentuados de sabores, pero es muy sabrosa debido a su mayor cantidad de grasa.
Existe una eterna discusión con los sabores de las dos tipos de piezas y ya sabemos que sobre gustos no hay nada escrito, pero si es cierto que el rendimiento del jamón es mucho mayor.
La estructura ósea de las piezas también es distinta, la estructura de la paleta hace que el corte sea más complicado y cueste más sacar las lascas. También las lonchas del jamón serán más grandes.
Existe una diferencia lógicamente en el precio, aunque no podemos centrarnos en esto para valorar las piezas, sí decir, que si las piezas son de la misma calidad siempre será más caro el jamón.
Tanto una pieza como la otra tienen unos matices de sabor y aroma que cada vez son una nueva experiencia sensorial para el paladar, cada consumidor lo va valorando según sus preferencias.
Un consejo, si el consumo va a ser esporádico y es para una pequeña familia, mejor una paletilla, ya que su consumo puede llevar más tiempo. La paletilla al ser más pequeña hace que su consumo sea más rápido y se pueda degustar con todas sus propiedades intactas.