Existe mucha bibliografía que describe este perfil, es muy extensa y con muchos relacionados. Aquí os daremos una pequeña y amena pincelada de situaciones que veremos están a la orden del día.
La gente tóxica es ese tipo de personas que sólo con su presencia, al entrar a un lugar empiezan a destilar negatividad, la cual viralizan a todo y todos los que están a su alrededor. A una persona tóxica no le importas nada, solo eres un instrumento para sus intereses. Cuando quieres reaccionar ya estas contagiado, aún y todo cuando te hace sentir mal, culpable, exigente, egoísta o desconsiderado y te aísla de tu lugar, te anula, se adueña de ti y de tu tiempo, además puede llegar a cambiar tu personalidad y todo eso sin darte apenas cuenta.
Como siempre, casi todo en la vida tiene remedio, el mejor de todos los remedios es la prevención. Aprender a ver a estas personas tiene sus trucos ya que siguen un perfil concreto de comportamiento.
El primero de todos es que no paran de quejarse: que hace mucho frío, que si el café esta aguado, la comida muy salada, ese jamón de bellota está raro. Hablan sin medida pero no dicen nada y creen que todos les llevamos la contraria. Sus problemas son los más complicados y no se pueden solucionar, no se les puede ayudar porque no se dejan, no admiten consejos ni siquiera profesionales debido a su enorme ego y soberbia.
Entonces, lo que hay que hacer es salir corriendo, huir, salir de sus dominios y estar atento porque insistirá con una destreza manipuladora propia de una secta. Si ésta persona es muy cercana a ti, habla a pequeñas dosis con ella intentando que vea que está en una dinámica gris y perjudicial, pero apartándote, si no puedes, lo que recomiendan los expertos es que se exija respeto inmediato.
Esta viralización se ha acentuado con la crisis y cada vez hay más gente convertida en víctima. Creen que tienen una nube de mala suerte que se ciñe encima suyo y que existe un complot del universo que conspira contra ellos. Seguro que con éstas características todos conocemos a alguien, así que… a correr. La vida es muy bonita siempre que estés rodeado de gente bonita.
Fuente:
James Geofrey, Maria Dolors Mas Del Blanch, Rocio Galván, Tomás Navarro
