El Pilates es un ejercicio físico o entrenamiento creado a principios del siglo XX por Joseph Hubertus Pilates, quien lo ideó basándose en su conocimiento de distintas especialidades como lo son la gimnasia, la traumatología y el yoga, uniendo así la fuerza muscular con la mente e integrando la respiración y la relajación.
Esta práctica requiere de mucha concentración, porque lo que busca es controlar al cuerpo con el uso de la mente para encontrar un equilibrio entre ellos.
La metodología se basa en desarrollar los músculos internos para dar estabilidad y fuerza a la columna vertebral. Este método se hizo famoso de una manera casi secreta en el mundo de la danza, después vendrían músicos, actores y deportistas de élite. Más tarde lo adaptaron los fisioterapeutas, ortopedistas y rehabilitadores. Pero fueron los antiguos alumnos, ya después de la desaparición del creador del método los que difundieron la herencia al resto de EEUU y Europa.
Este método, que aunque tiene más de 70 años, se empezó a conocer hace apenas una década pero ha ganado innumerables adeptos; y es que los resultados de esta práctica son vivibles a corto plazo. Según su creador en 10 sesiones notarás la diferencia, en 30 te cambiará el cuerpo.
Con Pilates se consigue una notable tonificación muscular, se mejora el sistema sanguíneo y el linfático, se corrige la postura corporal y se estiliza la figura.
El método Pilates también desarrolla aptitudes como la atención y la disciplina en quienes lo practican. Además, se logra un dominio total de la motricidad y un mayor conocimiento del propio cuerpo, lo que aumenta la autoestima y refuerza nuestra capacidad de concentración y control. Por lo tanto, conseguimos hacernos más fuertes de cuerpo y mente.